Abril, 2017, Internacional
Japón es ejemplo en muchos aspectos relacionados con la eficiencia, limpieza y calidad de vida. Ya vimos que hasta piensan en nosotros, los occidentales, a la hora de utilizar sus sofisticados váteres. Hoy nos hacemos eco de Kamikatsu, una localidad japonesa en la que la basura es importante, o mejor dicho, han eliminado los residuos para reciclar prácticamente todo. Un lugar más de los muchos que hay en el país nipón donde nos sorprenden.
Kamikatsu, pueblo sin basura
Aogashima es el pueblo japonés que se encuentra dentro de un volcán. Kamikatsu es famoso por algo distinto: reciclar prácticamente toda la basura que hay. Se encuentra situado en la Prefectura de Tokushima, en una isla del oeste, entre Hiroshima y Kioto. Aquí no existen los contenedores ni los camiones de basura.
Cada habitante es responsable de llevar sus residuos a los centros de estación de recogida. Esto supone un ahorro importante para Kamikatsu, ya que se encuentra en un lugar remoto y montañoso donde el acceso de los camiones de basura es complicado y costoso.
En 2001 renunciaron a la construcción de dos nuevas plantas incineradoras de residuos, algo que estaba subvencionado por el Gobierno estatal, y en su lugar comenzaron a tomar medidas alternativas y que han triunfado.
Una de las peculiaridades fue la de instalar un Centro de Intercambio, un lugar donde los habitantes dejan lo que ya no quieren y pueden llevarse cosas que otros vecinos han depositado. Por ejemplo si un vecino no va a utilizar más su vieja plancha, puede hacer un trueque por un cargador de móvil.
34 categorías distintas
Además, el 90% de todos sus desechos son reciclados en un total de 34 categorías diferentes. El objetivo es que en el año 2020 se alcance el 100%. Con el dinero recaudado al reciclar, el municipio ha podido poner en práctica diferentes subsidios para la compra de materiales o bonos de comida. Una forma diferente y ecológica de obtener recursos para repartir posteriormente entre su población.
En el centro de recogida de residuos, en la zona de papel, por ejemplo, hay contenedores específicos para revistas, periódicos o cartones. Todo perfectamente dividido.
Ya sabemos que Japón, en este sentido, es diferente al resto. Allí, por ley, los negocios están obligados a reciclar y tienen los sistemas de clasificación de residuos más potentes del mundo. En tecnología sigue el mismo rumbo y ya hasta hay un androide que presenta un programa de televisión.